El Instituto Andaluz de Administración Pública organizó el pasado 24 Octubre 2017 en Sevilla las II Jornadas de Innovación Social y Excelencia Docente. Participé con la conferencia de cierre «Aprendizaje activo y tecnología para la innovación continua» [video].
En mi intervención parto de la idea de que en las organizaciones actuales la innovación es el «nuevo normal» y no un proceso excepcional que sucede cada cierto tiempo y se concentra en ciertas partes de la propia organización. En la mayor parte de organizaciones este nuevo modo operativo requiere de una transformación profunda que afecta tanto a las formas de hacer como a la cultura.
Por otra parte innovar significa finalmente generar nuevo conocimiento y por tanto aprender, de forma individual y colectiva. Por tanto aprendizaje e innovación son las dos caras de un mismo proceso y constituyen el contexto donde se deberían desarrollar las personas y las organizaciones.
Pero esto implica que el aprendizaje debe operar de formas muy diferentes a los procesos educativos convencionales y debe estar integrado con el resto de procesos y proyectos de la organización. A partir de este marco, analizo los diferentes modelos de aprendizaje, la evolución de la educación y como imagino su futuro próximo (en parte ya presente) y las reglas básicas para pilotar con ciertas garantías un proceso de transformación de una organización.