Una nueva fase vital, nuevos retos profesionales

Desde hace unas pocas semanas ya no formo parte del equipo de Teamlabs, la empresa que hace casi cuatro años contribuí a fundar y a la que he dedicado buena parte de mis esfuerzos en este tiempo. Han sido años duros e intensos de los que me llevo un gran aprendizaje y una estrecha relación con algunas buenas personas con las que espero continuar viviendo y trabajando mucho tiempo. Continuaré siendo parte, aunque ya no le pueda dedicar todo mi tiempo, de la red internacional Mondragon Team Academy (MTA) para contribuir en lo que pueda a mejorar de forma continuada su calidad y su impacto. No tengo más que admiración para un proyecto que nació hace ya 8 años como una pequeña, y quizás loca, iniciativa de unas pocas personas dentro de la Universidad de Mondragon y que a día de hoy congrega a unas 1000 personas aprendiendo en equipo en 10 lugares del mundo. En este sentido estoy ayudando a equipos emprendedores a lanzar iniciativas dentro de la red que espero que muy pronto vean la luz, además de apoyar el fortalecimiento de la infraestructura global que da soporte a la red.

No es fácil tomar una decisión así pero poco a poco voy entendiendo que mis principales aportaciones al proyecto Teamlabs habían sucedido ya y que no era el lugar donde podía continuar desarrollando mis pasiones y proyectos. Sigo y seguiré siendo socio y contribuyendo desde esa posición a su desarrollo. Pero a la vez no es la organización en la que es posible profundizar en los retos y en los estilos de liderazgo que creo necesita un proyecto que hoy en día aspire a poner su grano de arena para cambiar el mundo a través de la educación. Estas reflexiones las he ido plasmando en una serie de posts en los que abordo la necesidad de organizaciones radicales, como generar innovación disruptiva, o como liderar desde la reputación y la competencia.

La otra parte de la motivación de mi cambio se debe al deseo de iniciar proyectos que aborden nuevos retos y para los que debo buscar un nuevo equipo y socios. Por fortuna me estoy encontrando a mi alrededor gente estupenda y con gran talento que se está sumando a la iniciativa; algunas de estas personas son descubrimientos recientes y otras son el resultado de largas relaciones y conversaciones. Nunca había sido tan consciente como en estos días de como el placer de colaborar para aprender y disfrutar es la mejor fórmula para llegar a alianzas sólidas que ahora pasan a un nuevo nivel.

Mi obsesión es continuar trabajando en la transformación de la educación. Para mi esto pasa por tres tipos de acciones, complementarias entre si, que deseo sean parte del ADN de mis nuevos proyectos. En primer lugar, en estos años he aprendido que el valor del emprendimiento no está solo, ni principalmente, en lograr que las personas creen empresas, sino en desarrollar una actitud y habilidades en las personas que mejoren su propia experiencia de aprendizaje y les haga tomar una actitud activa y constructiva como ciudadanos y profesionales. Pero el emprendimiento es solo una parte de la ecuación y la otra tiene que ver con el manejo de los «lenguajes contemporáneos» como pueden ser el diseño o el digital, con el desarrollo de un pensamiento crítico y con el autoconocimiento y desarrollo personal. En síntesis como crear programas de aprendizaje modulares y flexibles que se adaptan a las trayectorias de vida y profesionales de las personas. Y como contribuir a la transformación de la universidad trabajando desde dentro y fuera a la vez.

En segundo lugar me preocupa enormemente desarrollar instrumentos para garantizar que la educación llegue a todo el mundo en función de sus talentos y necesidades y no de sus recursos económicos. Otros lo han hecho ya (y en ese sentido para mi es un referente Minerva Schools) y creo que es el momento de atreverse a intentarlo.

Y por último deseo afrontar el escalado de un proyecto educativo y especialmente como hacerlo en Latinoamérica. Mi experiencia reciente construyendo redes educativas y de años trabajando en diferentes proyectos y contextos en numerosos países latinoamericanos me hacen pensar que es posible lograrlo.

10 comentarios

  1. Mucho hecho y mucho por hacer.

    Muchos éxitos y a seguir avanzando.

    Fuerte abrazo!!!

    @jlcasal

  2. Te desearía suerte… pero no te hace ninguna falta! 😉 Muchos éxitos y que yo los vea, a ser posible de cerca!

  3. Te deseo lo mejor Juan. Enhorabuena por tu valentía, esfuerzo y dedicación. Los que te admiramos, seguiremos de cerca tus pasos. Mucha suerte, y al lío! 😉

  4. pepin fernandez

    Estimado Juan, te deseo lo mejor en tus nuevos proyectos, espero que sean igual de ilusionantes que los anteriores y quien sabe si algún dia nos encontramos en algun proyecto en común.
    felicidades de nuevo y buena suerte
    pepin

  5. Buen viaje Juan. Muchas ganas de seguir tu viaje de exploración y seguir aprendiendo. ¡Gracias!

  6. Estimado Juan
    Desde este extremo Sur te envío un saludo y abrazo fraterno, he seguido tus periplos y no me cabe duda de que elijes ahora lo correcto, no necesariamente lo más fácil, ha sido esa tu índole y patrón, la búsqueda persistente por innovar y mejorar.. Me encantaria participar aunque sea a la distancia de tus nuevos rumbos, tienes acá un nodo en el Sur para generar un pulso de esa red que visionas. Abrazo
    Andres

  7. Te deseo lo mejor en esta nueva etapa. En donde estés piensa que has dejado huella y transformado estructuras. Un fuerte abrazo desde Tenerife

  8. CARLOS VARELA

    Un gran deseo de nuevos descubrimientos… Eres un ejemplo!!!
    Buena Ruta

  9. Javier Martínez

    De lo poco que te conozco creo que eres una persona muy capaz y que todo lo que te propongas, lo conseguirás.
    Enhorabuena y espero que nos veamos pronto.

  10. Pingback:XTribe: inspiración para el diseño de experiencias de aprendizaje | Juan Freire

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