Organizaciones hedonistas, pasión y catalizadores

1. Del individuo y el trabajo …

Ignacio Sotelo parece proponer en El País, Religión, trabajo y sufrimiento, que la era industrial fue una anomalía, dado que en su opinión los modelos de motivación que utilizaban en la antigüedad los ciudadanos libres que regresan ahora en plena era digital para toda la población:

En la Antigüedad, el ciudadano libre desplegaba distintas actividades empresariales, sociales, políticas, culturales, pero en rigor no trabajaba. El condenado a trabajar era el esclavo; el ciudadano libre quedaba excluido, en primer lugar, porque hacer lo que mande otro supone una dependencia incompatible con el status libertatis. El ciudadano libre decide por sí mismo qué hace, cómo y cuándo, sin obedecer más que a la ley. Realiza actividades (ergon), en latín, opera, pero no trabaja (ponein), que además de un sometimiento a la voluntad de otro, conlleva un ponos, un esfuerzo doloroso. Que trabajar significa sufrir se trasluce también en el vocablo latino de labor, que viene de labare, desfallecer ante una carga.

Con el cristianismo el trabajo, vinculado al sufrimiento, adquiere una dimensión positiva. Por el pecado de desobediencia, Dios condenó a nuestros primeros padres "a ganar el pan con el sudor de la frente"…

Educar para el trabajo y el esfuerzo doloroso, con un control estricto de las pasiones y una recia disciplina en el comportamiento, elevando la obediencia a virtud, se opone a la educación que recibía el ciudadano…

Max Weber enlaza el surgir del "espíritu del capitalismo" al ascetismo intramundano del calvinismo y el puritanismo. Sin ningún género de duda el cristianismo ha contribuido de manera decisiva a la posición central que el trabajo ha ocupado en la sociedad capitalista moderna…

La revolución tecnológica de los últimos lustros -automatización y nuevas técnicas de comunicación- promociona una sociedad en la que el beneficio del capital depende cada vez menos del trabajo asalariado. El trabajador no ha conseguido, como pronosticó Marx, acabar con el capital, sino que ha sido el capital el que puede prescindir del trabajo. La civilización industrial demandaba una educación que ponía en un primer plano disciplina y obediencia, las dos virtudes del esclavo que tanto exaltó el cristianismo. Pero en un mundo en el que está desapareciendo el trabajo basado en el esfuerzo físico, directamente vinculado al sufrimiento, se va perdiendo la significación que estas dos cualidades tuvieron en el pasado…

Importa tener muy presente que en el mundo de la automatización y de las nuevas tecnologías, no sólo se precisa de una población más educada, sino sobre todo educada de otra forma. La vieja educación que exaltaba la disciplina, la obediencia y la disposición a sufrir, ha de dejar paso a una que, sin renunciar al gozo de vivir, ponga en un primer término el espíritu crítico y la iniciativa individual. Ahora que por fin se puede hacer extensiva a todos, tal vez haya que inspirarse en la educación que recibía el ciudadano libre en la Antigüedad, basada en un desarrollo personal que impulse la iniciativa de cada cual.

El propio concepto de trabajo, tal como se entiende en una lógica industrial y cristiana, parece estar en declive. El “nuevo trabajo” es cada vez más sinónimo de actividad creativa dependiente de la iniciativa y responsabilidad individual.

2. … a las organizaciones hedonistas …

En Near Future Laboratory se definen las nuevas formas de organización (New Forms of Organization — Digital Bohemia) propias de la bohemia digital a la que se incorporan paulatinamente los (antiguos) “trabajadores” reconvertidos en profesionales creativos. Estas son sus siete reglas, propuestas por Holm Friebe (autor del libro Wir nennen es Arbeit, We call it work), para la colaboración de estos profesionales que están reinventando las empresas para reconvertirlas en organizaciones hedonistas (el post incluye un video de su intervención en la conferencia LIFT):

Rule 1, The 7 Nos – No office. No employees. No fixed costs. No pitches. No exclusivity (company doesn’t own your life). No working hours (results only). No bullshit.

Rule 2: Work-Work Balance – balance projects for clients with your passion projects, given equal priority and attention.

Rule 3: Instant Gratification – profit immediately with work; no salaries, billable time/project, always keep 10% of profit for the company for play money; pay bills immediately as well

Rule 4: Pluralism of Methods – tech solutions for social problems, use online tools for collaboration; Skype, Google calendar, Google Docs

Rule 5: Fixed Ideas – live up to your intellectual obsessions and dark desires at work; take them seriously; don’t be afraid to offend people;

Rule 6: Responsibilities Without Hierarchies – each project as to have one person incharge, but it can be anybody; beginning of year retreat in the country; rethink the business model; sift through projects and leaders take them on;

Rule 7: The Power of Procrastination – don’t try to be too efficient; good deas will adapt and catch on, even if you neglect them for a while; they have to ripen; there is a natural Darwinism of ideas

Rule 7.5: Marketing by Feuilleton – no adverstising, no PR; do something interesting and press coverage will be yours; they get coverage in the culture section

Los nuevos profesionales viven con pasión su actividad que se extiende a dominios antes no considerados como trabajo y se organizan de una forma flexible y adaptativa utilizando intensamente la tecnología y reglas propias de las redes abiertas.

3. … lideradas por catalizadores.

El modelo basado en la pasión propio de las organizaciones hedonistas, formales o no, requiere algunas condiciones básicas para que sea funcional. En primer lugar todos los involucrados deben poner en el esfuerzo una elevada dosis de pasión y compromiso. Si contamos con equipos y redes con este perfil, su gobierno no es una cuestión de liderazgo clásico (y en particular duro), es más un problema de catalización de las potencialidades, más próximo al poder blando.

Tal como comenta John Robb, en The Guerrilla Catalyst, Ori Brafman y Rod Beckstrom (en la actualidad Director del National Cybersecurity Center del gobierno estadounidense) proponían en su libro The Starfish and the Spider. The unstoppable power of leaderless organziations que estas nuevas organizaciones “sin líderes” tradicionales necesitan catalizadores que no se preocupan de organizar la estructura, agregar poder o proporcionar una dirección. Por el contrario su papel es actuar como:

  • Connectors. Able to map, mine and connect loose networks of people with similar needs/interests.
  • Onsite helpers and Trust builders. Willing to work with people on the ground in the role of helper. Forges emotional bonds and encourages trust.
  • Supporters. They let the network navigate itself forward by walking away from leadership responsibilities/roles. They trust the network and embrace its ambiguity.

Nuevos líderes capaces de soportar la angustia que provoca el aparente desorden, la flexbilidad y la ausencia de organización y que se ocupan del arte de conectar nodos creativos en redes de profesionales apasionados. Cambios radicales que están mucho más cerca de lo que podamos pensar si nos quedamos en la observación de la superficie de muchas organizaciones que, mientras se reinventan en la trastienda, siguen procurándose una estética organizativa convencional.

Un comentario

  1. un tema bastante interesante, sumamente contemporáneo que en parte tiene que ver con el debate que arde en muchas de las instituciones de educación superior. mientras estudiaba en un «small liberal arts college» de ny, una y otra vez la administración escolar hacia hincapié en la importancia de la educación ‘clásica’ que estábamos recibiendo ahí. tal vez la retórica de ellos era provocada por la popularidad de las careras técnicas (o en las mentes de muchos, careras mas practicas/ aplicadas) o por la ansiedad que provocaba en alumnos saber lo poco renumerado que ocupaciones como ‘investigador’, ‘artista’ y ‘escritor’ son. la mantra repetida por la administración era que mientras que las aptitudes que una educación en un colegio de artes liberales desarrollaba (eg. la habilidad de escribir bien, el análisis y la lectura critica…) eran perdurables, un diplomado en una carera técnica caducaría al paso del tiempo. sin duda, cada vez es mas difícil mantener una buena calidad de vida con el sudor de nuestras frentes. ¿cual será la educación mas apropiada para crear ciudadanos que puedan competir globalmente? La misma pregunta de otra manera, ¿Qué es el papel del gobierno en todo esto? ¿y el rol de la inequidad social? en fin, un tema con muchas intersecciones.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.